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Elías es uno de mis preferidos, la Biblia cuenta de él en el Nuevo Testamento que era una persona como cualquiera de nosotros, sujeto a pasiones, tentaciones, etc, etc. Si! como cada uno de nosotros.
Podríamos escribir muchas cosas de Elías: por ejemplo que oró y no llovió por tres años en toda la tierra, cómo no recordar que fue alimentado por cuervos que cada mañana y cada tarde le traían carne y pan, cómo no mencionar que resucitó al hijo de una viuda y que la misma por un milagro que el mismo profeta hizo, tuvo abundancia de aceite y harina en medio de una escases tremenda.
Todas estas verdades se desprenden de relatos que la misma Biblia nos cuenta, estos, si bien son impresionantes, hoy quiero guiarte a entender una verdad trascendente para Elías, que dejará de un hecho histórico para llegar a ser inspiración para tu vida si realmente imitas la fe de Elías.
Nos llevará un par de días considerarlas, así que te animo que tomes el pasaje de 1 de Reyes 17 y 18 y te dispongas a ser transformado por esta palabra.
Cuando estas solo, NECESITAS estar seguro del Dios en el cual crees.
Cuando una persona se siente sola, es muy común que esta se deprima, desista de sus proyectos, reniegue de Dios, o por lo menos se queje de su situación.
Elías estaba en una de los momentos más importantes de su vida y estaba solo, el relato nos dice que solo él había quedado de los profetas del Dios Poderoso, y por otra parte de los otros profetas, los falsos, porque servían a dioses que son falsos, quedaban, 450 de baal y otros 400 de asera. Si nuestra matemática es correcta, la situación era la siguiente 850 falsos profetas apoyados por el estado y un solo profeta del Verdadero Dios.
Querido lector, a eso llamo yo una situación desfavorable a los ojos humanos, no hay posibilidad de encuadrar este episodio como equilibrados en fuerzas lógicamente hablando.
Así es muchas veces en la vida del cristiano, por un momento piensa que esos 850 falsos profetas eran 850 problemas para Elías. Alguna vez tuviste 850 problemas?, quizá no tantos, pero en ocasiones eran tan grandes que no he sabido para donde ir, quizá esta sea una aproximación a tu respuesta.
Estos problemas te han cercado tanto que hasta te han quitado las fuerzas. Si es así, hoy quiero soltarte una palabra de fe.
Considera a Elías, el vio más allá de los 850, Elías miro y contemplo el Dios que tenía, él sabía perfectamente el poder del Dios en quién había creído.
Nuestra enseñanza para hoy, “atrévete a confiar en el Dios en el cual has creído”.
“Señor, mis problemas podrán ser grandes, tú los conoces todos, pero yo sé en quien he creído, TU ERES MAS GRANDE que mis problemas, TU ERES MI DIOS, hoy en fe, desafío cada uno de mis problemas y me prepara para batallar con ellos y vencerlos en tu nombre oh Dios”
Mañana seguiremos con Elías.
Pastor Jorge
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